En el 2020, 729.000 personas adquirieron la ciudadanía de un Estado miembro de la UE en el que residían, esto es un aumento del 3 % con respecto a las 706.400 de 2019. Este aumento se debió principalmente a los aumentos registrados en España (+27.300 ciudadanías españolas concedidas que en 2019), seguido por los Países Bajos (+21.800), Suecia (+16.000) y Portugal (+11.000).
En toda la UE, se concedieron 729.000 nacionalidades ese año, registrándose el mayor aumento en España con +27.300, seguida de los Países Bajos con +21.800, Suecia con +16.000 y Portugal con +11.000, mientras que en Bélgica disminuyó en -6.700.
Según datos de Eurostat en 2020, un total de 126.266 personas (+27.300) adquirieron la nacionalidad española. En los Países Bajos fue de 55.943 (+21.800) personas y en Bélgica de 33.915 (-6.700) personas.
En toda la Unión Europea, el número de personas que adquirieron la ciudadanía en el 2020 ascendió a 729.013 (+22.616), aunque Italia encabeza la lista con 131.863 personas y debajo de España se encuentra Alemania con 111.170 personas que adquirieron la ciudadanía.
Al igual que en 2019, la mayoría (85%) de quienes obtuvieron la ciudadanía de la UE en 2020 eran ciudadanos de un país no perteneciente a la UE o apátridas. Los antiguos ciudadanos de otro Estado miembro de la UE representaron el 13% del número total de ciudadanías adquiridas.
En 2020, los marroquíes fueron el grupo más grande entre los nuevos ciudadanos de la UE con 68.900 personas, de los cuales el 86% adquirió la ciudadanía de España, Italia o Francia, seguido por los sirios con 50.200 personas, de las cuales el 49% adquirió la ciudadanía sueca.
Los albaneses con 40.500 personas obtuvieron la ciudadanía italiana en el 70% de los casos y los rumanos con 28.700 personas obtuvieron la ciudadanía italiana en el 40%.
