Hay cosas que a veces hacen la vida un poco más fácil y el típico flessenlikker neerlandés (lame botellas) es una de esas cosas. Antes era muy normal ver un ‘lamebotellas’ o ‘lamedor de botellas’ en todos los hogares, pero hoy en día es menos frecuente verlos. Entonces, la pregunta es: ¿Todavía se usan y qué es realmente?
El «lame botellas» (flessenlikker en neerlandés) es una herramienta de cocina neerlandesa similar a una espátula muy pequeña. Está diseñado para raspar o «lamer» con ella, el contenido de botellas largas que serían imposibles de alcanzar con otros utensilios de cocina.
Aunque la herramienta se vende en Noruega e incluso alguien ha dicho que se originó allí, se cita en todas partes como una herramienta de cocina esencialmente neerlandesa.
¿Para qué sirve el flessenlikker, ese invento simple pero genial?
En tiempos pasados la leche no se vendía en envases de cartones (TetraBrick) o botellas de plástico como hoy en día. El lechero entregaba la leche al cliente en botellas de vidrio o se compraba así en las tiendas.
Muchas veces el lechero incluso llegaba a los domicilios con grandes latas de leche y el cliente podía tener en su casa una jarra llena de leche.
Pero el «lame botellas» (flessenlikker) no estaba destinado directamente a la leche, sino a la natilla (llamada Vla en neerlandés) y al yogur. Estos dos productos, también se vendían en botellas de vidrio pero eran mucho más espesos que la leche. Por ese motivo, siempre quedan sobras en el fondo de la botella y así se inventó el flessenlikker.
Con el flessenlikker puedes limpiar las sobras para sacarle el máximo partido al contenido de una botella de vidrio o de un envase tipo botella de plástico.
Las botellas de leche tenían un cuello de botella estrecho, pero debido a que la natilla (Vla) y el yogur son más espesos, el cuello de la botella tenía que ser más amplio para que pudiesen salir del mismo. Eso también facilitó la limpieza del interior de la botella con el flessenlikker.
¿Cómo funciona?
El funcionamiento del flessenlikker es realmente muy sencillo. Inserta el flessenlikker dentro de la botella y gracias al mango largo podrás llegar al fondo. Luego pon la pequeña espátula contra el vidrio y lentamente jalas las sobras hacia la abertura de la botella.
Te sorprenderá la cantidad de producto que puedes obtener de una botella. Si no tienes un flessenlikker, también puedes voltear la botella o el frasco con la tapa puesta (o con un plato o vaso debajo) boca abajo y la gravedad hará el resto. Pero eso, por supuesto, es menos divertido.
Cartón
Hoy en día, los lácteos ya no se venden en botellas de vidrio y eso pasa más, sobre todo con la natilla neerlandesa Vla y el yogur, que son vendidos en cajas de cartón. Hay personas que todavía usan un flessenlikker abriendo la caja de cartón en la parte superior y luego quitando las sobras del cartón, pero la mayoría de las personas hacen que la caja de cartón sea más pequeña para quitar los sobrantes de la natilla o yogur de la caja del cartón.
Tacaños
Los extranjeros que ven el flessenlikker en acción a menudo quedan asombrados por su uso, pero aún más por la simplicidad de la invención. Pero, muchos piensan inmediatamente el término ‘Hollandse zuinigheid’ .
¿El vaciado completo de una botella o paquete de cartón tiene que ver con el conocido tacaño neerlandés o es simplemente lógico aprovechar al máximo el embalaje? Nosotros creemos que lo más lógico es utilizar todo el producto que viene dentro de la botella. Imagen: I980808, CC BY-SA 4.0 , via Wikimedia Commons
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